Tener electricidad en nuestra casa es algo tan común en la actualidad que la mayoría de personas ni si quiera llegan a preguntarse cómo llega la luz a sus hogares. Y lo cierto es que, aunque hoy sea habitual, no es algo sencillo. Ni mucho menos. Tras cada enchufe e interruptor que nos brinda electricidad, existe una instalación eléctrica que permite que a él llegue la luz de manera segura y eficiente.
Y, aunque la mayoría de personas suele dedicar más tiempo a cómo ahorrar en la factura de la luz, la realidad es que también es importante conocer qué tipos instalaciones eléctricas existen a día de hoy. Así que, al igual que hicimos en el artículo ‘Cuadros eléctricos industriales: qué son y tipos’, hoy vamos a darte más detalles sobre las instalaciones eléctricas más comunes.
Instalación eléctrica: ¿qué es exactamente?
Antes de hablar de los tipos instalaciones eléctricas que existen, vamos a detallar qué es exactamente una instalación de este tipo. En resumidas cuentas, podríamos decir que se trata de un conjunto de sistemas y circuitos que permiten que la corriente eléctrica circule de manera correcta por edificios y otras infraestructuras.
Y su objetivo no es otro que el de proporcionar energía eléctrica de manera segura y eficiente. Por este motivo, antes de realizar cualquier instalación de este tipo es necesario realizar un proyecto que permita prevenir fallos y garantizar la seguridad. Además de tener en cuenta toda la normativa vigente al respecto.
Tipos instalaciones eléctricas: tensión y uso
En lo relativo al tipo de instalaciones eléctricas que existen, podemos hacer dos diferenciaciones clave. Por un lado, podemos clasificarlas en base a su tensión. Y por otro, en función al uso que se le vaya a dar a la instalación de electricidad.
Según la tensión
La tensión eléctrica es un factor clave que determina cómo se configura y usa una instalación de este tipo. En función de la tensión, podemos encontrar tres grandes tipos de instalaciones:
- De alta y media tensión: estas instalaciones ofrecen gran potencia y se usan generalmente para grandes instalaciones de uso industrial. Su potencia es superior a 1000 voltios.
- Instalaciones de baja tensión: son las más comunes de todas, ya que son las utilizadas a nivel doméstico y comercial. Su potencia máxima es inferior a 1000 voltios y superior a 24 voltios.
- De muy baja tensión: estas instalaciones se emplean muy poco, ya que su potencia tiene que ser inferior a 24 voltios y no pueden alimentar dispositivos de gran potencia.
Según el uso
Además de clasificar las instalaciones de electricidad en base a su tensión, también podemos diferenciarlas en función al uso que se les puede dar.
- Instalaciones generadoras: generan electricidad a través de otras formas de energía, como la solar o la eólica.
- De transporte: son líneas eléctricas que conectan dos o más instalaciones.
- Transformadoras: en este caso reciben energía y modifican su tensión para aumentarla o disminuirla.